sábado, 19 de mayo de 2007

Cuarto fragmento

"...Se helaron ante un cadáver que tenía un círculo en la frente, un poco más arriba de la base del ceño de ese rostro abotagado y liso que parecía transparente y sin nada adentro, sin estructura ósea, sólo agua, grisáceo, hasta creyó distinguir Catalina la esquirla que tenía forma de triángulo isósceles. Esta vez fue Olga Lizbeth la que recuperó el control: ¿Y este qué tenía ahí? Un cuerno como de rinoceronte que podía ser cebo o chichón o los cachos de la infidelidad, por esa bola lo identificaron, y por las uñas de los dedos gordos que parecían cascos. Visto el material fotográfico, volvió a sentir Catalina esa confusión de sentimientos que no se pueden mezclar, ganó el negativo, su reflexión fue la siguiente: Ninguno era Gerardo… ¿ninguno era? O ninguno se parecía..."